Ciudad Mexicano,Chihuahua.-.-de sus escoltas en un supuesto intento de secuestro, donde los delincuentes lograron llevarse por unos minutos a uno de sus hijos, el cual fue liberado debido a que se implementó un operativo en toda la región.
Ibarra Álvarez era ampliamente reconocido en el ámbito empresarial y se desempeñaba el ramo hotelero y automotriz, siendo uno de sus más grandes logros la agencia denominada Saturno 2000.
Se desempeño como consejero de la Fundación del Empresariado Chihuahuense, además dentro de la política participó como secretario particular del ex gobernador Óscar Órnelas Küchle.
Su empresa ha sido una de las más beneficiadas con compras masivas de vehículos a través de los gobiernos priístas.
El ataque se registró poco antes de las 2 de la tarde, cuando el empresario, uno de sus hijos y cuatro escoltas viajaban en una pick up de doble cabina y a la altura del kilómetro 9 del tramo Cuauhtémoc-Álvaro Obregón, un grupo de hombres armados a bordo de un vehículo trató de detenerlos, originándose un enfrentamiento.
Ibarra alcanzó a recibir atención de paramédicos pero falleció, en tanto que los tres escoltas que lo protegían murieron en el lugar de los hechos y uno más resultó herido, lo cual permitió que fuera secuestrado Abraham Ibarra, de 24 años, quien momentos después fue liberado en una brecha ubicada a 2 kilómetros del sitio donde fue privado de la libertad, con heridas menores.
Las víctimas de los hechos viajaban en una camioneta blanca Cheyenne 2010, de cuatro puertas y fueron interceptados por los delincuentes, quienes dispararon a la unidad más de 100 balazos, hiriendo y dando muerte a los escoltas y a Ibarra Álvarez, para luego secuestrar al hijo de éste.
Los escoltas alcanzaron a repeler la agresión, pero no fue suficiente para salir con vida del ataque, pues tres murieron al instante y uno más, junto con Ibarra Álvarez, terminó herido, alcanzando a recibir auxilio de paramédicos que se trasladaron al lugar de los hechos, quienes se llevaron con vida únicamente a un cuarto escolta.
Los escoltas alcanzaron a pedir auxilio y refuerzos antes de ser asesinados, por lo que acudieron agentes de la Policía Municipal de Cuauhtémoc y de la Policía Ministerial, así como elementos del Ejército, quienes montaron un operativo de búsqueda de la víctima que quedó con vida.
De acuerdo con la Fiscalía General del Estado, que emitió un reporte de lo sucedido ya en la tarde, el operativo tras el multihomicidio fue en búsqueda de los agresores en las carreteras y brechas de la región. Buscaron un vehículo Honda gris de modelo reciente, donde se presume viajaban cuatro atacantes, quienes sometieron al joven Abraham, quien resultó con lesiones por las esquirlas.
A raíz del operativo que se extendió hacia todas las salidas de Cuauhtémoc y las cercanías con la comunidad de Rubio, fue liberado el joven secuestrado en una brecha, de lo que dieron aviso pobladores que lo auxiliaron, para luego ser llevado a un hospital fuertemente custodiado por agentes de las diferentes corporaciones de seguridad. Su estado de salud fue reportado fuera de peligro ayer por la tarde, en tanto que el otro escolta permanecía con lesiones severas.
Al lugar de los hechos acudieron agentes del Ministerio Público para dar fe de los hechos y ordenar el levantamiento de los cadáveres, que fueron trasladados al Servicio Médico Forense para la necropsia de ley.
Por esas acciones, fue cerrada la carretera Cuauhtémoc-Álvaro Obregón, lo cual generó un congestionamiento vehicular durante más de una hora, hasta tres kilómetros de distancia de donde se presentó el incidente.
Personal de Servicios Periciales de la Fiscalía del Estado levantó evidencias del sitio del enfrentamiento, encontrando más de 100 casquillos percutidos de calibre .223 y 9 milímetros, tanto en el exterior como en el interior de la camioneta de las víctimas, razón por la cual se supone fue repelida la agresión.
Los escoltas fueron identificados, por credenciales que portaban, como Víctor Manuel Olate Álvarez, Concepción Galindo y Antonio Hernández, quienes de acuerdo con versiones extraoficiales eran gente de confianza del empresario camarguense, propietario de la agencia Saturno 2000, así como otros negocios en su municipio de origen y otros de la entidad.
De acuerdo con las investigaciones, el empresario sólo estaba de paso en Cuauhtémoc, pues tenía su residencia en Camargo y viajaba constantemente por razones de negocios, pues aparte de su actividad empresarial prestaba sus servicios como abogado de instituciones bancarias.
La Fiscalía General del Estado mantiene bajo custodia al hijo del empresario y desplegó, en coordinación con otros cuerpos policiacos y personal militar, un operativo para la localización de los agresores, sin que se tengan reportes de resultados exitosos.
Las autoridades no dieron a conocer líneas de investigación ni cuál fue el móvil del crimen, salvo la hipótesis del secuestro en contra de Ibarra Álvarez o su hijo.
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