Andy Novell F.
Michoacán en los últimos años ha tenido la característica de estar preso por el crimen organizado, primero un grupo local que se convirtió en transnacional denominado "La Familia Michoacana", después surgen "Los Caballeros Templarios".
Es claro que cuando el crimen organizado está incrustado en una entidad, siempre busca obtener recursos y poder a como dé lugar. Algo que las autoridades estatales, sobre todo federales, deben de tomar en cuenta son las denuncias de la senadora del PAN Luisa María Calderón Hinojosa.
Hace un par de días señaló que cuenta con las pruebas suficientes para denunciar ante la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SIEDO) las supuestas amenazas que sufren alcaldes panistas por parte del crimen organizado.
Agregó que: "En este estado la gente no hace denuncia porque su vida corre peligro; tengo datos, tengo fechas, tengo muchos datos y a mi tiempo voy a hacer la denuncia en la SEIDO".
La senadora recalcó que incluso ya existen presiones de la delincuencia organizada de quiénes serán los candidatos en las próximas elecciones.
"El colmo es que los convoquen a la CNC y les digan: 'tienen que apoyar la candidatura de los jóvenes del Frente Juvenil Revolucionario y es que no se preocupen por los candidatos, que ellos los van a poner'; eso ya rebasa los gobiernos municipales y estatales".
Por qué hasta el momento no se investigan las denuncias de una ciudadana que el año pasado, también denunció la incursión del crimen organizado en las elecciones para gobernador, alcaldes y diputados locales.
Ya está la denuncia de la senadora, sólo basta esperar que las autoridades tomen cartas en este asunto. Será que las autoridades desconocen que el crimen organizado cobra sus cuotas a todos los ciudadanos incluyendo presidentes municipales.
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