Un llamado desde la tribuna del Congreso Local hizo el diputado local del PRI, Lauro Sánchez López, para que el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, ordene a la Secretaría de Seguridad y Desarrollo Social la atención de regiones como la Sierra Norte y Ciudad Serdán, donde la presencia del crimen organizado alcanzó a los ciudadanos.
Después de que durante los dos primeros años del gobierno morenovallista los diputados locales guardaron silencio ante el incremento de la inseguridad en Puebla, este jueves el presidente de la comisión de Hacienda advirtió que el desarrollo económico sólo es posible en un ambiente de gobernabilidad social y con la inclusión de todos los actores de la sociedad.
A la postura del priísta se sumó el diputado local de Nueva Alianza, Hugo Alejo Domínguez, quien expresó: "Hago uso de la palabra para hacer un llamado al gobierno del estado y al gobierno federal, para que a través de sus dependencias se aboquen a canalizar la solución a los diferentes problemas que se han planteado y hablo principalmente, en este caso, de Tetela de Ocampo, de Zautla y de Olintla".
Mientras el Acuerdo por Puebla está en construcción, el ex asesor del gobernador Mario Marín Torres planteó que hay asuntos políticos y sociales que están afectando a la sociedad poblana en sus distintas regiones donde les preocupan secuestros, extorsiones y levantones.
En lo que toca a seguridad pública hay hechos que han propiciado un clima de intranquilidad social en la Sierra Norte, y en específico en los municipios de Xicotepec, Venustiano Carranza, Pantepec y Francisco Z. Mena, entre otros.
"Ahí los ciudadanos nos han expresado temor por lo que consideran la presencia del crimen organizado, y un ambiente similar preocupa a los habitantes de las regiones de Ciudad Serdán y Acatzingo, donde hay un ambiente de inseguridad por acontecimientos delictivos frecuentes en lugares como Cañada Morelos, Esperanza, Guadalupe Victoria y Tlachichuca entre otros."
El priísta agregó que hay otros problemas de orden político y social como lo ocurrido en Olintla, Tlapacoya y San Felipe Tepatlán, del distrito de Zacatlán, donde intentan construir plantas hidroeléctricas, sin haber construido información suficiente y convincente a los lugareños.
A lo anterior se suman la inestabilidad del tianguis de San Martín Texmelucan y los proyectos de explotación minera en la Sierra Norte, donde hay una verdadera amenaza al medio ambiente y la calidad de vida de los habitantes de esa zona del estado.
Las preocupaciones ya fueron planteadas al gobierno del estado, a través de los responsables de la política interior y por eso solicitamos que se atiendan y proporcione información de los proyectos a los afectados, expuso Lauro Sánchez.
Hugo Alejo agregó que, independientemente de los problemas que se enfrenten en Puebla, es necesario que las autoridades estatales respeten los derechos constitucionales de los ciudadanos y en particular, los de los afectados con la construcción de plantas hidroeléctricas, dijo.
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