CULIACÁN._ Ismael Zambada Imperial, "El Mayito Gordo", cayó en los terrenos de su padre. El Ranchito de los Burgos.
Donde fue detenido el miércoles, está ubicado a escasos tres kilómetro de El Álamo, pueblo natal de Ismael "El Mayo" Zambada. La zona de la sindicatura de El Salado es conocida por ser del dominio de "El Mayo" Zambada y por donde supuestamente se mueve con frecuencia.
En diferentes ocasiones los pobladores han dado a conocer las fiestas del Día de las Madres o en Navidad que el narcotráficante organiza para la comunidad de la que es originario y los pueblos vecinos.
En la casa en la que fue capturado "El Mayito Gordo", los Zambada solían organizar fiestas privadas, cuentan los vecinos, a las que acudían "El Mayo" y su hijo.
En este pueblo de El Ranchito de los Burgos, conocido así por el apellido de las familias fundadoras, habitan apenas alrededor de 100 personas, la mayoría de ellas dedicadas a cultivar sus tierras y criar ganado.
El inmueble donde fue capturado "El Mayito Gordo" se diferencia de las demás por ser de construcción más reciente que el resto de las casas.
Desde el exterior, el inmueble se aprecia discreto, pues sólo es una barda con un portón blanco.
Hacia el interior sólo se observa un tejaban y debajo una góndola para transporte de materiales y a un costado una casa que cuenta con aire acondicionado y televisión satelital.
El terreno, según cálculos de los marinos, mide aproximadamente 20 metros de ancho por alrededor de 60 de largo.
La vivienda está ubicada en una de las calles maltrechas que, de acuerdo con los habitantes, conduce hacia el poblado El Vizcaíno, en la sindicatura de Las Tapias; y se puede llegar hasta la carretera a Sanalona.
Esa casa la visitaban con frecuencia los Zambada y de vez en cuando organizaban fiestas, revelaron vecinos.
Ayer por la mañana, la casa era resguarda sólo por una patrulla con ocho elementos de la Secretaría de Marina.
La mañana de ayer, según cuentan los habitantes, el rancho estaba más tranquilo de lo normal, por la presencia de los marinos desde el miércoles por la tarde.
Los pobladores narran que la operación de los marinos fue bastante discreta, pues no hubo escándalos, ni tampoco disparos cuando irrumpieron en la casa de Zambada Imperial.
Durante la tarde del miércoles de repente las calles de la comunidad se llenaron de patrullas y efectivos armados, comentaron.
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