miércoles, 12 de noviembre de 2014

"Tenían un tiro de gracias, los pusieron en bolsas"

CIUDAD DE MÉXICO, 12 de noviembre.- Los jóvenes texanos hallados muertos en Matamoros, tenían un tiro en la cabeza.

Es pusieron una bolsa y los encintaron, señaló Pedro Alvarado padre de las víctimas, quien además exigió que la alcaldesa Leticia Salazar Vázquez pida licencia a su cargo. Las víctimas son los hermanos Érica, Alex y José Ángel Alvarado Rivera de 26, 22 y 21 años, respectivamente, residentes de Texas

En entrevista radiofónica con Adela Micha para Grupo Imagen Multimedia, reiteró que el grupo Hércules fue quien levantó a sus hijos en una taquería, después de la escolta de la alcaldesa se desprendiera de la caravana para dirigirse donde se encontraban los muchachos y a´si dar la orden de llevárselos a Matamoros.

Asimismo, Jorge Rentería, abogado coadyuvante del caso, señaló que la alcaldesa no ha sido llamada a declarar, ni el secretario de Desarrollo Social.

Tenían un tiro en la cabeza, les pusieron una bolsa y los encintaron", afirmó Pedro Alvarado.

Indicó que las autoridades no se han puesto en contacto con ellos a excepción de la estatal, pero el caso ya fue atraído por la PGR.

Pedro Alvarado dijo que los testigos señalaron que sus hijos estaban comiendo en una taquería, cuando policías se bajaron de su camioneta para revisarlos, y fue ahí cuando llegó una camioneta procedente de la caravana de la alcaldesa de Matamoros "un hombre bajó del vehículo y dio la orden de llevarse a los muchachos, después ya no se supo nada".

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Por su parte, Jorge Rentería, apuntó a la caravana de la alcaldesa de Matamoros como responsables del "levantamiento" de los jóvenes y agregó que hay testigos que han sido amenazados.

El grupo (Hércules) regresó a la taquería para amenazar a los comensales", señaló.

El padre de los jóvenes informó que él los buscó cuando su esposa le llamó para informarle que sus hijos no había llegado a casa, en Texas, fue cuando se puso a buscarlos todo el lunes, sin obtener resultados, para el martes acudió a la PGR, a la Marina, pero nadie le daba razón., así lo hizo diario.

Así pasaron varios días, también fui con la alcaldesa, pero no había fichas, entonces fui con el secretario particular de la alcaldesa, le dejé la foto y los nombres de mis hijos", dijo.

Para identificar los cuerpos, Pedro Alvarado los reconoció por la ropa y por los tatuajes que tenían sus hijos, pero mencionó que los cuerpos ya estaban muy descompuestos.

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