CIUDAD DE MÉXICO, 9 de julio.- Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, ex líder del PRI en el DF y quien fue señalado por encabezar una red de trata de personas con fines de explotación sexual con recursos de su partido, consideró que ni a un narcotraficante le han hecho lo que a él, al mantenerlo en investigación durante 16 meses.
"Se hicieron más de 547 pruebas, se tomaron declaraciones a más de 318 personas. Ni siquiera el expediente de algún narcotraficante tiene todo lo que hicieron en mi caso", se lamentó, en entrevista con Adela Micha para Grupo Imagen Multimedia.
A propósito de la noticia que se conoció este miércoles, en el sentido de que la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal decidió no ejercer acción penal en su caso, por falta de elementos, reafirmó que fue víctima de un "montaje" para destruirlo políticamente.
"Nunca estuve en un proceso; estuve en un asunto de investigación. Nunca se consignó a un juez" el expediente porque "no encontraron ningún elemento. Se fabricaron testimonios. No estoy en audios ni en videos", aclaró.
Consideró que se trató de una maniobra para sacarlo del escenario en la esfera política, de cara a las elecciones.
Yo argumenté alguna vez que no iba a permitir imposiciones en las candidaturas del 2015, que iba a dejar que la gente y los militantes del partido decidieran democráticamente a quienes iban a ser sus candidatos. Eso lastimó intereses políticos y fabricaron una historia que se la vendieron a una periodista que dice tener mucho poder en México, y esta periodista la subió (la noticia)…y por eso vino este mito que al final de cuentas se convirtió en un gran mitote mediático."
"Todavía ella sigue diciendo que es verdad lo que ella presentó. Fue un reportaje que supuestamente ella mandó a hacer con una reportera infiltrada que nunca dio la cara, que nunca la pudo presentar", y el montaje se descubrió, sostuvo.
Dijo tener más claridad en la certeza jurídica de su situación personal, aunque el proceso no se ha finiquitado.
Vamos a esperar, a analizar, porque lo que a mí me hicieron no fue un asunto de debilitamiento hacia mi persona, sino de exterminio.
"Vamos a evaluar, vamos a esperar, vamos también a contestar, porque, al final de cuentas, el asunto jurídico todavía no lo podemos dar por finiquitado hasta que cause ejecutoría."
Gutiérrez de la Torre incluso mencionó que evalúa cómo proceder legalmente.
"El asunto de la calumnia, de la difamación, si bien no se persiguen ya penalmente, el que inventa o formula una mentira y repetirla mil veces hasta convertirla en verdad, eso no puede seguir pasando en un país democrático, y que te inventen esto para destruirte políticamente."
Según él, su caso tuvo un trasfondo que tiene que ver con clases sociales.
"Fue un exterminio, un asunto clasista, aunque no se quiera ver así; fue un asunto de que aquellos que provenimos de la clase social, de organizaciones sociales, de la estructura más paupérrima si así lo quieras tomar, de la Ciudad de México, pues no podemos llegar más allá, porque hay intereses que se lastimaron, que se inventaron. Hoy se observa que no hubo un solo elemento para su consignación a un juez.
"Se hicieron más de 547 pruebas, se tomaron declaraciones a más de 318 personas. Ni siquiera el expediente de algún narcotraficante tiene todo lo que hicieron en mi caso.
En este caso, quienes provenimos de las luchas sociales en el PRI, quienes venimos de llenar los mítines, de adular a los grandes dirigentes, pues no se te permite llegar más allá, y aparte hay comunicadores que le dan al 'bullying mediático' en contra de este gordo, moreno, etc."
E insistió en su inocencia en el caso por el que fue investigado.
"La red de prostitución ni siquiera existe en el Código Penal del Distrito Federal. Los medios se inventaron; hay que conocer la ley.
Yo nunca mantuve sometida a nadie, nunca le dije: 'oye, acuéstate con fulano y me das parte de lo que el fulano te da'; eso es trata (de personas). Nunca trasladé….nunca…etc., etc. Lo sigo negando.
"Se contrataba servicio de algunas empresas de edecanes, que ahí están; y que además todas las que se contrataron fueron entrevistadas por el Ministerio Público", adujo.
Reiteró que no hubo ninguna práctica ilícita de su parte en el año y tres meses que fue presidente del PRI en el DF.
Y señaló que su actividad política, a pesar de que no goza de un buen estado de salud en este momento, la mantiene.
Me he reunido con algunos grupos. Hay que entender que cuando en el 97 se da la debacle del PRI (en el DF), el único que se queda a tratar de tapar las grietas para que no se desborde la presa, es el de la voz; todos los demás huyeron. Corrieron y saltaron del barco, y el único que se quedó a enfrentar al PRD fui yo, con otros compañeros.
"Tengo mis derechos suspendidos (en el PRI), pero mi conciencia no", advirtió.
"La ciudad de México es la más importante del país, es la caja de resonancia, y tal parece que no se ha querido consolidar al partido en la Ciudad de México", reprochó.
dgp
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