El hombre asesinado fue identificado únicamente como Miguel, quien recibió dos impactos de bala en la cabeza y dos más en la espalda, cuando trataba de refugiarse en la iglesia, donde quedó sin vida.
Al escuchar los balazos dentro de la iglesia, párroco Sergio Peralta Carbajal, de 31 años, salió para ver lo que ocurría y encontró el cuerpo de Miguel en la entrada del recinto religioso.
Al lugar llegó la hermana de Miguel, Gabriela, de 33 años, quien identificó el cadáver, quien al parecer es hermano de otro hombre que hace unas semanas fue encontrado sin vida en un puente de la misma zona, al parecer un asaltante que intentaba escapar y cayó a las aguas negras perdiendo la vida.
A la escena del crimen se presentó el licenciado Carlos Tapia Valdés, agente del Ministerio Público de San Agustín, quien dio fe de los hechos y ordenó el levantamiento del cadáver para que fuera trasladado al Servicio Médico Forense.
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