Todo inicio la noche del pasado domingo, cuando vecinos reportaron al 911 un homicidio registrado en una vivienda ubicada en las calles Ejido Concordia y Ejido Robinson, siendo los primeros en llegar al lugar los elementos de la Policía Municipal, quienes confirmaron que se trataba de un aparente ajuste de cuentas.
El lugar de inmediato fue asegurado por la FGE y sus peritos, que procedieron al levantamiento de evidencias mientras que el cuerpo del ejecutado era levantado por el SEMEFO y llevado a sus instalaciones para practicarle la necropsia de ley.
El victimado fue identificado como Miguel Delgado Ríos, de 37 años, quien fue acribillado en la sala del inmueble, mientras que nadie tenía noticias del paradero de su hermano, ya que los dos vivían juntos.
Sin embargo, a los investigadores se les olvidó revisar debajo de la cama de una de las habitaciones, donde la mañana del lunes fue encontrado el cuerpo sin vida del hermano de Miguel, que intentó esconderse de los sicarios, pero también fue ejecutado.
Fueron familiares quienes 12 horas después encontraron el cuerpo de Luis Alberto Delgado Ríos, de 35 años, cuando a muy temprana hora acudieron a realizar labores de limpieza para lavar los enormes charcos de sangre que había dejado la ejecución.
"¿Como puede ser posible que se les haya olvidado, como es que no lo vieron?, desde ayer andábamos buscando a mi otro tío y miré", reclamaba uno de los sobrinos de Miguel y Luis Alberto, al mismo tiempo que esperaban que el cuerpo fuera asegurado por las autoridades.
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