México Un juez federal ordenó la aprehensión de cuatro mandos de la División de Seguridad Regional de la SSP federal por encubrir presuntamente a los 14 agentes que participaron en el ataque al vehículo diplomático de Estados Unidos, ocurrido en Tres Marías el pasado 24 de agosto.
La subprocuradora de Control Regional, Procedimientos Penales y Amparo, Victoria Pacheco Jiménez, informó que los detenidos confesaron haber recibido órdenes de sus superiores para dar una versión distinta a lo que ocurrió en esa fecha.
Sin embargo, aclaró que no se ha detenido a los mandos porque cuentan con una suspensión provisional que otorgó un juez de amparo, ya que el delito por el que son requeridos no es grave.
El mando más alto involucrado en este hecho, agregó, es Juan Manuel Pacheco Salgado, inspector general de la Policía Federal, detenido la semana pasada; sin embargo, pagó una fianza de 35 mil pesos para enfrentar su proceso penal en libertad.
Asimismo, rechazó que la PGR haya investigado a federales por el delito de crimen organizado. "En la subprocuraduría a mi cargo no tenemos esa línea de investigación", expresó.
Al dar a conocer los avances de la investigación sobre el ataque al vehículo diplomático en el que viajaban dos funcionarios de Estados Unidos y un elemento de Marina, la funcionaria dio una versión distinta a la de la SSP sobre esos hechos.
Esta dependencia reveló que la presencia de los agentes en Tres Marías se debió al secuestro de Salvador Vidal Flores Pérez, funcionario del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). Después vino la confusión.
Pacheco Jiménez reconoció que un día antes del tiroteo fue plagiado el director de Protocolo del INAH, "pero objetivamente nada tiene que ver con la investigación, es un asunto que se está investigado en el fuero común, no corresponde al fuero federal.
"No estaba asignada la investigación, no había colaboración para que la autoridad federal realizara esa investigación, es decir, no tiene relación con los hechos que investigamos", comentó.
Respecto a los disparos que realizó supuestamente el marino Fabián Molino Yera (según un reporte de la Unidad de Asuntos Internos de la SSP), la subprocuradora señaló que todos los casquillos levantados en el lugar corresponden a armas de la Policía Federal, "es decir, no hay un indicio que demuestre que hubo disparos de armas diferentes" a esta corporación.
MANDOS
La funcionaria aseguró que días antes de culminar la ampliación del arraigo contra los 14 agentes, éstos declararon que sus superiores les ordenaron dar una versión distinta de lo sucedido.
Al iniciar la indagatoria, los policías manifestaron que iban uniformados, en vehículos balizados (con logos oficiales) y dispararon contra la camioneta en respuesta a una agresión. También señalaron que se encontraban en un operativo antiasalto y en investigación de un secuestro.
No obstante, "ya casi para concluir la investigación, presentaron de manera libre y espontánea una declaración por escrito, la cual fue ratificada ante el Ministerio Público, en presencia de sus abogados, en la que reconocen que por órdenes de sus superiores vestían de civil y se transportan en vehículos no balizados, de lo cual ya tenían conocimiento sus superiores en la unidad Morelos.
"En todo momento señalan que cumplían órdenes de sus mandos", expresó la funcionaria.
En la agresión a la camioneta, detalló, participaron los tripulantes de tres vehículos de los propios agentes: un Chevy azul, una camioneta Voyager verde, una X-Terra amarilla y un Sentra gris.
En la conferencia se mostraron fotografías tomadas de los videos obtenidos de cámaras ubicadas en el crucero Tres Marías, en la carretera federal México-Cuernavaca; en la subestación Topilejo de la CFE, y de la carretera México-Cuernavaca, las cuales captaron el presunto paso de los automotores involucrados.
También hallaron fotos del hecho en 12 teléfonos celulares de los agentes, en los que se "aprecia" que la Policía Federal fue la primera corporación en llegar a la zona fue esa corporación.
Los policías portaban 15 armas, 12 de ellas largas y tres cortas, y realizaron 152 disparos contra el vehículo diplomático; 40 por ciento de los disparos se realizaron contra las ventanillas del piloto y copiloto.
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