De acuerdo con la Procuraduría del estado de Jalisco, el cadáver de Daisy Yenire Ferrer Arenas fue hallado el martes en un canal al oriente de Guadalajara, capital de Jalisco, tras una denuncia anónima.
El cuerpo de la joven, de entre 25 y 30 años, tenía heridas de bala en la cabeza y al parecer no presentaba huellas de violencia.
La modelo fue identificada por el permiso de residencia en México hallado cerca del cadáver.
Según los primeros datos recabados por las autoridades, la modelo desapareció la noche del 12 de diciembre pasado y hasta el hallazgo de su cadáver nadie había solicitado rescate por ella.
Algunos de los amigos de la joven confirmaron a la fiscalía que Ferrer Arenas era de origen venezolano y trabajaba como modelo en Jalisco, aunque el organismo solicitó a la Secretaría de Relaciones Exteriores mayor información sobre su estatus migratorio.
La modelo vivía en una colonia de Chapalita, en Zapopan, municipio que forma parte de la zona metropolitana de Guadalajara.
Hasta esta mañana su cuerpo no había sido reclamado por familiares.
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