El equipo donado ayudará a las fuerzas hondureñas a mejorar sus operaciones nocturnas para localizar y capturar miembros del crimen organizado transnacional.
Desde octubre 2011, los militares estadounidenses han donado equipo valorado en más de 2.5 millones de dólares, incluyendo botes interceptores, equipo de sensor de aeronaves, camiones, radios, chalecos y cascos.
Todas las donaciones son parte de los esfuerzos para entrenar y equipar las unidades confiables de las Fuerzas Armadas de Honduras asignadas para combatir los grupos de crimen organizado, tales como los carteles de droga.
El jefe de la sección Naval del Grupo Militar de Estados Unidos en Honduras, capitán de Corbeta Kevin Self hizo entrega del equipo a los miembros del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, fuerzas especiales del ejército y naval en la oficina del Grupo Militar de los Estados Unidos en Tegucigalpa.
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