GUANAJUATO, Gto. (proceso.com.mx).- Cuatro personas murieron de manera violenta en el transcurso de las últimas 24 horas en Acámbaro y Uriangato, municipios del sur del estado, en la frontera con Michoacán.
Tres de las víctimas fueron asesinadas en Acámbaro, de acuerdo con el reporte que proporcionó el subprocurador de Justicia de la región, Armando Amaro Vallejo.
Ayer por la tarde un comerciante informal que vendía accesorios para aparatos eléctricos recibió dos disparos con un arma calibre 9 milímetros, cuando se encontraba atendiendo su puesto en la calle Hidalgo, en pleno centro de la ciudad de Acámbaro.
Manuel Pozos Mandujano, de 29 años, estaba acompañado por uno de sus familiares, quien se retiró unos minutos para comprar comida. Al escuchar disparos éste volvió al lugar y encontró al hombre tirado en el piso, ya sin vida.
Esta mañana, alrededor de las 10:30 horas, los cuerpos de otros dos hombres fueron hallados en el interior de una camioneta tipo Ranger de color verde, la cual fue abandonada en la calle Democracia de la colonia Everardo Morales de ese mismo municipio, informó el subprocurador.
Las víctimas no han sido aún identificadas; una de ellos aparenta tener unos 60 años y el otro aproximadamente 30. Este último presenta una herida en la frente producida con arma de fuego.
El reporte fue hecho por la Dirección de Seguridad Pública Municipal de Acámbaro. Los cuerpos fueron trasladados al Servicio Forense para practicarles la necropsia.
Mientras que en Uriangato, otra víctima fue hallada abandonada sobre la avenida Las Palmas, poco después de las 4:00 horas.
El cuerpo del hombre estaba atado de pies y manos y tenía una bolsa de plástico enrollada en la cabeza con cinta canela.
Los peritos del Servicio Médico Forense informaron que murió asfixiado por estrangulamiento.
Entre sus ropas se encontró una cartulina de color verde en la que se amenaza a quien "no se alinee".
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